Bomba de tiempo.

Hola de nuevo mis hermosas princesas. Hoy no tengo idea de como me siento. Tengo miedo. Me siento un poco decepcionada, frustrada, ilusionada.
Volver a leer Abzurdah de Cielo Latini fue algo extraño. Vi a Cielo de otro modo. La primera vez que lo leí la idolatre, pero esta vez sentí que en una parte eramos muy parecidas y en la otra ella era demasiado drámatica. Lo de que sea drámatica lo comence a pensar porque leí los primeros siete capítulos de su segundo libro Chubasco. Nadie deja de ser jamás lo que es.

Ni ayer ni hoy hice ejercicio. Me siento con el espiritu roto. He fumado más y sé que no esta bien, pero no lo puedo evitar.

Mi horario de escuela será tan laxo que el simple hecho de pensar en el, me hace sentir que puedo fallar más facilmente. Al menos tendré tiempo para seguir escribiendo aca y decirles como va todo.

Siento que le fallo a Ana. Y no quiero. Les contaré acerca de alguien.
Lo conocí el año pasado en mi ex escuela, aunque en realidad habíamos estado toda la vida en la misma escuela pero en grupos diferentes. Ël siempre era como muy común y corriente y pues nunca le preste mucha atención. Pero el año pasado comenzó a hacer mucho ejercicio y cuando les digo que mucho, es mucho en verdad. Y bueno, pues se puso super fuerte y la verdad muy guapo. (Me da pena escribirlo haha) Y desde el año pasado como que pasaba algo entre nosotros. Me dijeron que yo le gustaba desde el principio del año y empezamos a salir. Pero yo aun no podía olvidar a otro tipo, así que cuando supe que me iban a cambiar de escuela, pues ni dije nada y no volví a hablarle convencida de que nada pasaría porque yo aun no terminaba de olvidar.
Durante todo este año tuve noticias de él y al parecer el mías también. Iré al grano, nos vimos de nuevo y estamos saliendo. Todo va bien, pero hay algo que me molesta un poco.
El es alto, tiene un muy buen cuerpo y yo...pues yo estoy así como estoy...
En mi cabeza no se ha dejado de oír una voz que me repite una y otra vez que si lo quiero debo de bajar de peso inmediatamente, que si no lo hago cualquiera vendrá y me lo quitará. Que él no puede estar con alguien gorda. Que debo de esforzarme para poder estar con él.
Y ese sentimiento me gusta, pero también me asusta. Me hace sentir un reto, pero un temor muy fuerte de perder otra vez.

No es la primera vez que me pasa esto. Pero la vez todo terminó muy mal. Yo con mi poco autoestima deshecho, inconsolable, paranoica, devastada, sin Ana. Fue un infierno, en verdad no miento ni exagero. Fue todo lo peor que me pudo haber pasado. Un año tarde en volver a Ana y en creer un poco en mí.

Así que siento una bomba de tiempo en mi cabeza. No sé cuando estallará, pero definitivamente que lo hará.